La ternura angelical de tu rostro
El destello lumínico de tus ojos
El aura de tu presencia
Irradia el espacio en tu universo
Y a pesar de tu aflicción
De tu dolor en sentimientos encontrados
De amor y compromiso
No pueden ni deben
Debilitar tu existencia
No pueden ni deben cambiar
A la maravillosa niña hecha mujer
Que hay en ti.
Ser sabio es ser concurrente
A nuestra esencia tocada
Por un ser divino
Es recordar como, y cuantas veces
Nos hemos levantado, cuando hemos caído
Y cuantas veces nos faltan
Por caer.
Sigue siendo un Ángel
Y reclama tus alas para volar
Y no caer.
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