Sin cables que me aten,
Solo apegos sufridos,
Descomunalmente arraigados
En mi pecho
Cual cometa con largo destello
Deambuló sobre la pacha mama,
Saboreando su leche,
Con mis pies húmedos
Mis manos en carbón dibujando,
Maravillado en la majestuosidad
Espiritualmente Paradisiaca,
Tocando las nubes con mis sienes,
Estrechando con un fuerte
Abrazo los protuberantes
Montes y nevados,
Con el frio en mis tuétanos,
Que regeneran inmortalmente
Mi existir, desconectado,
En un acogedor hogar donde
He sido adoptado,
Gracias eternidad
Ecuatropical.
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